Si te sientes cansada acuestate durante un cuarto de hora en una habitación a oscuras y coloca los pies en alto, encima de unos cojines y sin utilizar la almohada. Trata de relajarte durante ese tiempo y te sentiras como nueva. También puedes frotarte enérgicamente la palma de la mano derecha, la izquierda si eres zurdo, con la otra mano, así estimularas los nervios que se hallan bajo la piel. Parece mentira pero el cansancio desaparecerá.

Si tienes ese molesto hipo, bebe 7 traguitos de agua seguidos sin respirar, alivio inmediato.

Un truco para que puedas tomar el sol sin riesgos, consiste en limpiar periódicamente la cara y el cuerpo con una toalla mojada en agua fría. Contribuira a paliar el sudor, a cerrar los poros y a tonificar tus musculos. Así podrás con precaución continuar con tu exposición al sol sin que la piel se resienta por ello.