Las barritas de incienso son una tradición milenaria en Oriente que vale la pena descubrir. Quemando una de estas barritas -que pueden ser de variados aromas-puedes obtener distintos efectos, desde relajantes a estimulantes o afrodisíacos. Se coloca una de estas barras en un incensario y se quema el extremo, dejando arder la llama unos segundos antes de apagarla. La barra se quemará lentamente.

Si últimamente no andas muy animada, consigue un difusor de aceites y añádele aceite esencial de toronja. Ya verás como el agradable olor que desprende te hará sentirte más animada y alegre. Lo notarás al instante.

Esta es una infusión para combatir la migraña, incluso si ya se ha convertido en crónico. Se prepara mezclando, a partes iguales, las siguientes plantas: lavanda. manzanilla y lúpulo. Vierte una cucharada sopera rasa de la mezcla en una taza de agua caliente y deja en infusión, tapada, durante unos diez minutos. Filtra una vez pasado este tiempo y tómala tres veces al día, después de cada comida principal. Para mejorar su sabor, que suele ser bastante amargo, puedes añadirle una cucharadita de miel y una corteza de piel de naranja.