A la hora de comprar unos zapatos lo mejor es que sean cómodos, pero si cuando se los pones por primera vez le causan algunas heridas pruebe a sacar los beneficios del huevo. Separe la telilla de una cascara de huevo y aplíquela sobre la zona afectada. De esta manera, tendrá un alivio inmediato y curará las heridas. Para que no le suceda más, antes de ponerse los zapatos nuevos pase un algodón mojado en alcohol por la parte de atrás del zapato.
Si estás preparando el jardín para el verano y tienes todas las macetas de barro llenas de manchas, prueba a eliminarlas frotándolas con arena fina. Si las macetas acaban por adquirir una mancha blanca que no desaparece sólo con fregarla, sumerge la maceta en agua y vinagre durante una hora. Así, la maceta recuperará su color original. Una vez seca, barnízala por fuera. Si lo haces también por dentro, lograrás un efecto 'termo', que resguarda del calor y el frío.